“Me empujó para pagar el boleto primero” le explicaba
indignada a mi amiga Zora en Shanghai refiriéndome a una señora que se había
adelantado en la línea impunemente a los empujones para pagar el boleto de colectivo desde Yangzhou. En vez
de reír o contestar un “Increíble, estos chinos…”, Zora me miró y me contestó
“¿Esperabas que la señora hiciera otra cosa?”. No. Y honestamente, este tipo de episodios cada vez me irritan menos.
No hay día que no sea protagonista o que presencie una
conversación de este tipo… una queja, una muestra de poca tolerancia quizás, el
reflejo de sentirse rana de otro país. Pero, como he escrito en otros posts,
este tipo de situaciones son parte de un proceso inevitable de adaptación a una
cultura tan diferente a la nuestra que a veces nos asombra de la mejor manera y
a veces nos es (casi) imposible aceptar.
Al margen, yo casi siempre me veo riendo o al menos sonriendo, y todo gracias a las grandes
diferencias que nos separan. Esta es una recopilación de diferencias que espero les
arranque una sonrisa (o risa) y los ayude a entender un poco el país donde vivo
hoy.
Pequeñas grandes diferencias que espero los hagan reír un poco. |
Tráfico
En Argentina los autos circulan (casi) siempre en la misma
dirección, y si se vive en grandes ciudades como Buenos Aires los conductores y
ciclistas respetan las reglas de tránsito para no tener multas. A pesar de ello,
el espacio personal de los vehículos es nulo y el número de accidentes se
incrementa a medida que acerca la hora pico que indica que el día laboral ha
terminado y podemos volver a casa y sacarnos los zapatos.
En China, los autos circulan en diversas (si esa es la
palabra que quise usar) direcciones y por la calle, la vereda, la senda de las
bicicletas… o cualquier otro hueco en el que quepa el vehículo. Las reglas de
tránsito existen, pero la policía vial no presiona a los conductores y
ciclistas (temo para no hacerlos perder su integridad) y no sancionan cosas
como conducir una moto sin casco, con un pie en el manubrio para rascarse un
dedo mientras se atiende el teléfono celular con la otra. Conducir se vuelve un
juego en el que los peatones que cruzan sin mirar se vuelven obstáculos y los
autos y motos que entran en la calle sin disminuir la velocidad se avecinan
cual proyectiles en juegos de video.
Escupir y sonarse la nariz
En Argentina escupir es un acto diario poco aceptado por la
población. Sin embargo, siempre y cuando lo realicen los hombres y solo en la calle y a un
costadito, son hechos poco trascendentales. En general, los hombres pasados los treinta, que no temen descuidar
su imagen social, no pierden tiempo en descargar un rápido y violento menjunje
bucal que los libera temporalmente. La tarea se realiza con sutileza para
reducir el sonido al mínimo y así evitar vergüenza. Y si hay que liberarse de
fluidos nasales, utilizar pañuelitos descartables y pañuelos es preferible
antes de lucir famosas velas.
En China, escupir es algo que se espera de toda la
población. No es sano guardarse flemas y fluidos que pertenecen al exterior. El
acto consiste en absorber fluidos con la nariz y la boca de la forma más
ruidosa posible y durante el tiempo que se pueda, para después descargarlos en
cualquier espacio donde no haya zapatos o zapatillas en movimiento (sí, incluso
en cantero con flores de alguna casa, el piso del gimnasio, la pata de la mesa
en el restaurant…). Como escupir es de buena educación, sonarse la nariz con un
pañuelo es terriblemente irrespetuoso y da mucho asco. Por lo tanto, taparse un
orificio nasal y descargar flema por el otro de forma violenta en tachos de basura
se considera oportuno.
Usar pañuelos descartables para sonarse la nariz quizás no sea una buena idea. (dentromusica.com) |
Creer o no creer
En Argentina ya nos es muy difícil hasta creer en la
ciencia. Dudamos del gobierno, de los políticos, del doctor, del psicólogo, de
la maestra, del profe, de mamá y papá, de los diarios, (agregue aquí). Por ende
nos informamos como podemos y decidimos aceptar cierta realidad y somos
medianamente felices.
En China la población cree. Punto. Lo que se dice, se
aprende y lo que se aprende se enseña. Por eso, comer cosas de color rojo hace
bien ¿Por qué? Porque sí.
Los dátiles son rojos y por eso la mujer debería comerlos en cantidad. También por eso son más caros que el resto de las frutas secas. Lástima que nunca me gustaron mucho los dátiles... |
Seguridad
En Argentina, los criminales han encontrado tantas maneras
de quitarte lo que tienes que ya no vale la pena hacer una lista de recaudos
para que no lo hagan. Siempre hay una falla en dicho sistema. Muy triste, pero
verdad.
En China, la población viven con pánico por posibles robos
que pueden suceder a toda hora del día y más cuando cae un poco el sol. A veces pienso que más de uno se pondría un collar de ajos para que nadie se les acerque. Sin embargo, siempre pienso que la gente aquí es tan honesta, en general, que el proceso para convertirse en
criminal debe ser arduo y doloroso. Estoy segura que deben arrepentirse de cada
una de sus fechorías.
Viajar larga distancia
En Argentina si se viaja larga distancia en colectivo uno se
prepara para leer, mirar la película que pasan, escuchar música o dormir una
siesta si la distancia entre un asiento y otro lo permite.
En China, los chinos se preparan para comer, comer y comer.
Suben al colectivo con bolsas gigantes llenas de snacks que comen desde que se
sientan hasta que se bajan: nueces, patas de pollo, choclos hervidos, panes
rellenos, galletitas, albóndigas de cerdo, dumplings y salchichas al mejor
estilo chorizo son algunos de los refrigerios elegidos.
A veces envidio esa capacidad que tienen para comer todo el
tiempo sin engordar.
Restaurante 1
Estación de tren, Zhengjiang, 2 PM. Snacks varios. Ruidos varios. |
En Argentina, cuando uno va a un restaurante sabe que los
mozos quizás deban tardarse porque están atendiendo otras mesas, y cuando
llegan dejan los menús en la mesa para luego irse otra vez. Vuelve luego de un
considerable período de tiempo, toma las órdenes y luego la comida se hace
esperar un poco más. Para cuando la comida llega a la mesa, nosotros ya nos
hemos comido la cesta de pan con manteca o queso y sal y ya no tenemos espacio
para lo que pedimos… pero lo comemos igual hasta que realmente el estómago no
se puede estirar más.
En China, cuando uno va a un restaurante, la mesera ya está
en la mesa con los menús. Tiene lápiz y papel en alto y deja de respirar para
anotar el pedido. Aunque uno necesite tiempo para decidirse o dilucidar qué
dice el menú, la mesera no se irá de la mesa hasta que lo haya hecho. Luego
dejará palitos chinos y platos, pero no traerá pan… por suerte la comida NUNCA
se hace esperar. Siempre tardan entre cinco y diez minutos en servir. Y a pesar
de lo abundantes que son los platos, los chinos dejarán comida en ellos si es
que pueden. Poder dejar mucha comida en la mesa es un reflejo de tener un buen
pasar económico.
Niños
5 minutos y ya está en la mesa |
En Argentina, los buenos modales se adquieren de los padres
desde que los niños nacen hasta que tiene la edad de ir a la escuela (sé que da
para comentarios, pero piensen que se algo se aprende durante esos años). Para
ese entonces los niños ya saben que hay que lavarse los dientes al menos dos
veces al día, que gritar, patalear y golpear el piso en señal de que algo no
les gusta no está bien visto, que morder a alguien y no soltarlo te convierte
en paria y que para cortar la torta en un cumpleaños es vital esperar a que se
soplen las velas (obvio).
En China, padres y abuelos responden a los caprichos de sus
hijos, porque para eso están, desde que estos nacen hasta que empiezan a ir a
la escuela. Allí, estos esperan que los maestros los disciplinen por ellos.
Para ese entonces, los dientes de leche tienen más caries que diente, pegar un
alarido al fiel estilo Tarzán cada dos palabras seguidas es muy frecuente,
morder es instintivo y llorar para que mamá o papá les corte un pedazo de torta
antes de que el cumpleañero sople las velas es un derecho.
Feriados
Imaginen, solo imaginen. |
En Argentina, cuando un feriado cae un jueves se decreta fin
de semana largo. Cuando un feriado cae en otro día de semana a veces se pasa al
lunes para que la gente pueda tener un fin de semana largo… y cada año que pasa
se agrega un feriado más al calendario.
En China, cuando un feriado cae un jueves, el viernes
también es feriado, pero hay que trabajar el domingo. Ese día quizás yo deba
hacer el trabajo que hago los miércoles (porque así lo quieren mis jefes), se
siente como si fuera el lunes de una semana larguísima, pero no deja de ser
domingo y el resto del mundo está en la cama descansando.
Construcción edilicia
En Argentina, una empresa constructora tarda entre uno y dos
años en construir un edificio de 50 departamentos de uno o dos ambientes. Para
cuando terminan quizás la piscina no se pueda usar, pero hay electricidad, la
cañería va a donde tiene que ir y, más que mal, uno sabe que el departamento
estará en buen estado por unos cuarenta o cincuenta años.
En China, una empresa constructora trabaja día y noche
(créanme, los escucho trabajar en los edificios a las 2 o 3 am), para terminar
un edificio de incontables departamentos en menos de un año. Para cuando
terminan la piscina se puede utilizar, pero quizás no haya electricidad, quizás
la pileta del baño no tenga cañería que vaya a algún lado y las parecer lucirán
un verdor extraño que no es pintura (créanme).
Restaurante 2
En Argentina, nosotros cenamos tarde porque sí. Y nos gusta.
Por eso, cuando vamos a un restaurante TARDE, a eso de las 11 o 12 pm, los
dueños o gerentes (los meseros no) nos reciben con los brazos abiertos y
esperan a que nos vayamos para cerrar el local, aunque siempre se nos mire mal
o se corte la música.
En China, se cena a las 6 pm y después se va al gimnasio.
Los argentinos, entonces, nos enfrentamos a un gran problema: los restaurantes
también cierran temprano. Por eso sucede que, si uno encuentra un restaurant
abierto alrededor de las 9 pm, lo más probable sea que el dueño o los meseros
nos tomen el pedido, nos traigan la comida y nos echen cinco minutos después apagando
la luz, quitando los platos de la mesa (cosa que nunca hacen), barriendo encima
de nuestros pies (literalmente) y finalmente pidiéndonos que nos vayamos de
forma muy convincente.
Afecto
Me tuve que acostumbrar a algunos cambios de horario... cena a las 6 pm. |
En Argentina, yo siempre les digo a los chinos, somos de
tocar mucho. Nos gusta tocar, es como que todo es una extensión de nuestras
manos. Somos afectuosos y nos gusta demostrar nuestro amor por los nuestros en
cualquier oportunidad. Quizás demasiado a veces… díganme sino piensan en la
frase “búsquense un hotel” al menos una vez al día. Pero hay cosas que no
hacemos: tocar a los amigos. A los amigos se los abraza, se los besa en la
mejilla para decir “hola” y “chau”, se los agarra del brazo, pero mucho más no (¿cierto?).
Las amigas de la mano, del brazo, haciendo cucharita en el subte... (absolut-china.com) |
Entender
En Argentina, cuando un extranjero nos para en la calle para
preguntarnos algo en un acento extraño y rogando que hablamos un poco inglés en
general no dudamos en identificar sonidos, procesar la información, buscar
sinónimos, usar las manos, gesticular, agarrar un papelito y lápiz, preguntar a
otras personas… con el fin de entender qué es lo que el cristiano quiere.
En China, cuando uno se acerca a un chino para preguntar
algo, el chino mirará para todos lados deseando que no sea a él al que me
acerco. Si ve que así es, intentará caminar más rápido para que yo no lo
alcance. Si lo alcanzo, sabrá de inmediato que no podrá entenderme jamás. No
entenderá de lo que estoy hablando aunque no sea tan difícil, reirá nervioso y
huirá lo antes posible, pretendiendo que la conversación nunca ocurrió.
¿Por qué? Qué se yo.
Cumplir años
En Argentina, se nace un día y para celebrar que la
presencia de uno es vital en el mundo, cada año para la misma fecha nos
juntamos con amigos, nos hacemos regalos, comemos torta y nos vamos a dormir lo
más tarde posible para constestar mails, llamados, twits, notificaciones de Facebook,
etc… Desde ese momento, se cuenta cuántos años han pasado y esa cantidad de
años suele ser nuestra edad.
En China, cumplir años es un poco más complicado. Por ejemplo,
mis alumnos a veces tienen nueve años, a veces tienen diez y a veces once. Sí,
los mismos alumnos. Se cree que uno nació con un año de vida, puesto que se
cuenta el período de gestación. Además, si uno nació en enero o febrero, quizás
se agregue a esto un año más (ya que nacer antes es pertenecer al año anterior
y nacer después es pertenecer al año siguiente). En general hay que agregar un
año más a nuestra edad para tener una edad china, eso sí, si no nacimos antes de
febrero, sino se agrega más edad ¿Se entendió, no?
Hay muchas más diferencias entre Argentina y China… pero
creo que con estas os alcanza para seguir entendiendo un poco más el lugar en
el que estoy.